Entre cantos, poesía y memoria histórica, el Museo Arquidiocesano de Mérida abrió sus puertas para celebrar más de un siglo de custodiar el arte sacro y la identidad cultural de la ciudad, en un acto que unió tradición, música y fe
Prensa Arquidiócesis de Mérida
(15-08-2025) En un ambiente de gratitud y regocijo, el pasado miércoles 13 de agosto el Museo Arquidiocesano de Mérida conmemoró 116 años de vida cultural e histórica, recordando el decreto de fundación emitido en 1909 por el entonces obispo Antonio Ramón Silva García.
Esta institución, custodia del patrimonio artístico y religioso de la región, se erige como faro de memoria y fe para el pueblo emeritense.
El acto central tuvo lugar en la Sala 1 del Museo, donde el orador Freddy Criollo dio la bienvenida a los asistentes, resaltando la alegría que embarga a esta casa cultural en tan significativa fecha.

La primera intervención fue la declamación de un poema en honor a Fray Juan Ramos de Lora, con motivo de los 303 años de su natalicio. La obra, compuesta por el profesor sevillano Claudio Maestre —miembro de la Comisión Internacional Obispo Ramos de Lora (Delegación Española)—, fue recitada por Gabriel León Carrillo, diseñador gráfico del Museo, marcando la primera vez que se escuchaba en suelo merideño.
Seguidamente, la coral Cantus Mensurabilis, bajo la dirección de Zulay de Blanchard y Vladimir Blanchard, ofreció un recital titulado El Trayecto Vital de Fray Juan Ramos de Lora, un viaje musical por Venezuela, México y España.
El programa incluyó piezas como Caballo Viejo (Simón Díaz), Sortilegio (Hildebrando Rodríguez), Los Grifiñafitos (Henrry Martínez), Ay Compae (Luis Laguna) y un repertorio internacional con La Bikina, La Bamba, México Lindo y Querido, Alegre Sevillana y La Morena de mi Copla, entre otras, interpretadas por diversos solistas.
La celebración contó con la presencia de distinguidas personalidades, entre ellas el secretario de la Universidad de Los Andes, Manuel Morocoima; la directora del Museo Arquidiocesano de Mérida, Rosmary Urrea Pernía, junto a su equipo de gestión; el padre Alejandro León Mendoza, SDB, actualmente director de Colegios Salesianos en Alejandría (Egipto); su madre, la señora Celina Mendoza de León, merideña residente en Valencia (España); así como personal del Palacio Arzobispal y numerosos invitados.

En esta jornada de memoria y homenaje, el Museo Arquidiocesano de Mérida reafirmó su compromiso de seguir siendo custodio de la historia, la fe y la cultura, ofreciendo a las nuevas generaciones un espacio vivo donde el arte y el espíritu se encuentran.