El encuentro contó con la participación de la Superiora General de la Congregación de las Hermanas Dominicas y parte del Consejo General
Prensa Arquidiócesis de Mérida
(30-03-2025) Del 27 al 30 de marzo se realizó en la población de Mucuchíes la edición número 11 de encuentros nacionales de grupos antorcha, correspondiente a jóvenes de media general de las instituciones educativas de las Hermanas Dominicas de Santa Rosa de Lima.
El Grupo Juvenil Dominicano “Antorcha” es la denominación de los diferentes grupos juveniles de los colegios de la congregación de las Hermanas Dominicas de Santa Rosa de Lima.
Se nutre de la vivencia de los elementos de la espiritualidad dominicana, aportando su experiencia juvenil y laical; está compuesto por estudiantes de la etapa media general, que siguen a Jesucristo haciendo vida las huellas dejadas por Santo Domingo de Guzmán y Madre Georgina Febres Cordero y responden a las exigencias actuales de la fe con su vida y servicio.
Es una opción de seguimiento a Cristo para jóvenes laicos que han optado por ser luz en medio de la oscuridad y que, junto a la Congregación de Hermanas Dominicas Santa Rosa de Lima, quieren predicar el mensaje de Cristo aceptando a sus hermanos para mostrar el verdadero rostro de Dios que se compadece ante la necesidad de la humanidad.
El evento reunió alrededor de 400 jóvenes venidos de los 14 colegios de las Hermanas Dominicas, con la participación también de un grupo de jóvenes de otras instituciones educativas de la población de Mucuchíes.
El encuentro contó con la participación de la Superiora General de la Congregación y parte del Consejo General, así como también las jóvenes, postulantes y novicias en proceso de formación, y las de profesión simple o junioras, y una representación de los frailes dominicos, con Fray José Gregorio Lobo.
Cada grupo de jóvenes estaba acompañado por una religiosa, representantes y profesores de las instituciones educativas participantes.
A lo largo de estos días, los jóvenes participaron en la oración y la eucaristía y en actividades de piedad popular como rosarios de aurora, hora santa, viacrucis; la formación como parte del carisma de Santo Domingo, así como el deporte y las actividades recreativas y de integración.
Sor Emérita Ávila, Superiora General de las Hermanas Dominicas, aseguró que estos jóvenes “llevan dentro de sus corazones la antorcha que nuestro Padre Santo Domingo nos legó, que representa el compromiso de llevar la luz a donde hay oscuridad, de ser guías en los momentos de incertidumbre y de mantener viva la llama de la verdad y la justicia. Ustedes son herederos de esta misión. La luz que llevan no solo ilumina sus propios pasos, sino que inspira a quienes los observan. Es una vocación de servicio y amor”.
Continuó exhortándoles a que «porten esta antorcha con orgullo, honren el legado de Santo Domingo y sigan iluminando el mundo con su pasión, su esperanza y su dedicación. Porque donde hay jóvenes antorchas, hay futuro, hay cambio y, sobre todo, hay luz”.
Aquiles Espinoza, miembro del equipo organizador, describió la actividad como emocionante y hermosa. «Los jóvenes contentos de poder participar, de poder encontrarnos nuevamente, colocando todo en manos de Dios para que sea Él quien nos bendiga e ilumine el camino de tantos jóvenes, que ellos puedan irradiar luz a muchos otros y en el mundo que tanto necesita” dijo, Aquiles Espinoza, miembro del equipo local organizador.
Sor Marta Betancourt, en representación del Colegio Cardenal Quintero, manifestó que “es una alegría el poder concluir con éxito este encuentro; ha sido un trabajo arduo durante el tiempo de preparación, pero hemos tenido el apoyo y la respuesta de mucha gente que hizo posible esta actividad tan bonita, en especial al Colegio Cardenal Quintero que se abocó a organizar una actividad tan bonita, llena de fe, esperanza y del mensaje de Dios (…) los jóvenes han regresado a sus casas felices de lo vivido. Esperamos que esta semilla sembrada en este hermoso pueblo dé frutos abundantes”, finalizó.