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Parroquia San Isidro Labrador llevó el Santísimo Sacramento por sus comunidades en la actividad “Los Cielos Abiertos”

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Las comunidades se mostraron receptivas, participativas y profundamente agradecidas por esta visita que, más que un recorrido físico, fue una peregrinación espiritual hacia el corazón de Cristo

Prensa Arquidiócesis de Mérida

(08-04-2025) Durante quince días llenos de fe y devoción, la Parroquia San Isidro Labrador de Mesa de Las Palmas vivió una experiencia espiritual transformadora a través de la actividad pastoral “Los Cielos Abiertos”, una misión eucarística que llevó el Santísimo Sacramento por todas las comunidades que conforman la parroquia.

Los fieles, con profunda reverencia, recibieron la presencia viva de Cristo, adornando con esmero y recogimiento los monumentos donde se expuso el Señor Sacramentado.

En un ambiente de alabanza y oración, se entonaron cantos de adoración mientras la comunidad se disponía espiritualmente a través de la Palabra y la predicación.

Durante cada jornada, la proclamación del Evangelio fue el eje central, con meditaciones de las parábolas del Hijo Pródigo, la Oveja Perdida y el llamado a ser Sal y Luz del mundo.

Laicos comprometidos en proceso de formación ofrecieron reflexiones sencillas pero profundas que tocaron el corazón de los presentes.

El padre Ramón Parra, párroco de la comunidad, acompañó esta misión impartiendo el sacramento de la reconciliación, permitiendo así que muchos fieles regresaran a los brazos del Padre con un corazón renovado.

Luego de las confesiones, se dio paso a momentos intensos de adoración, oración de perdón, súplica al Espíritu Santo y cantos de alabanza y gratitud.

“Los Cielos Abiertos” fue un tiempo de gracia que dejó huella en el alma de cada feligrés. Muchos testimoniaron haber reencontrado la alegría de vivir su fe, experimentando el amor misericordioso de Jesús presente en la Eucaristía.

Las comunidades se mostraron receptivas, participativas y profundamente agradecidas por esta visita que, más que un recorrido físico, fue una peregrinación espiritual hacia el corazón de Cristo.

Con esta iniciativa, la parroquia renueva su compromiso de ser una Iglesia en salida, llevando a Jesús Sacramentado a todos los rincones.