Comunicaciones ArquiMérida

Miembros del Movimiento de Cursillos de Cristiandad (MCC) Mérida participaron en la Convivencia Regional 2025

5

Estuvieron presentes cursillistas de Mérida y de las Diócesis de Trujillo, San Cristóbal y El Vigía-San Carlos del Zulia. Un encuentro que llevaba por lema: “Vida apostólica desde la piedad: Transformando dirigentes para fermentar los ambientes”

Isvait Toro/ Pasante ULA

(05-06-2025) En un ambiente que invitó a la formación, la oración y la acción para un encuentro fraterno, se desarrolló la Convivencia Regional 2025 de los Movimientos de Cursillos de Cristiandad (MCC) en la diócesis de San Cristóbal.

En el encuentro, que se llevó a cabo desde el 30 de mayo hasta el 1 de junio, participaron los cuatro secretariados que integran el comité de la región Los Andes (Arquidiócesis de Mérida y las diócesis de San Cristóbal, Trujillo y El Vigía-San Carlos del Zulia).

Esta experiencia, que congregó a más de 60 cursillistas, contó con una planificación de diversos temas que permiten a los miembros del MCC ser parte de los agentes de evangelización activos que la iglesia católica necesita en la realidad actual.

En la cuenta de Instagram del MCC de la Diócesis de San Cristóbal (@mccdiocesisdesancristobal) se presentaron diferentes testimonios de los presentes en la convivencia regional. Una experiencia llena de cariño y fraternidad donde se espera que dé frutos para que más católicos puedan formar parte de esta experiencia eclesial.

¿Qué es el Movimiento de Cursillos de Cristiandad?

El Movimiento de Cursillo de Cristiandad (MCC) es reconocido formalmente como un carisma propio y original, que lo caracteriza, identifica y distingue de otros movimientos, asociaciones y comunidades de la Iglesia. El MCC se distingue por sus tres etapas, que son el precursillo, el cursillo y el poscursillo.

Su misión de evangelización ha llevado el amor de Dios a millones de personas y ha contribuido a la renovación de la Iglesia en todo el mundo.

El “kerygma” (proclamación) de los cursillistas está centralizado en ser testigos de la vida cristiana, siendo propagadores del Evangelio, dando testimonio de vida desde su experiencia personal y comunitaria. La oración es parte fundamental en su misión y es necesaria en cualquier actividad pastoral.