Antes de comenzar un nuevo ciclo formativo, las parejas servidoras del programa EPIM vivieron un día de encuentro con el Señor, fortaleciendo su fe y su compromiso con la Pastoral Familiar
Prensa Arquidiócesis de Mérida
(01-09-2025) El Encuentro de Preparación Inmediata al Matrimonio (EPIM), programa de la Pastoral Familiar de la Arquidiócesis de Mérida, realizó el pasado 30 de agosto de 2025, fiesta litúrgica de Santa Rosa de Lima, un retiro espiritual en la parroquia San Pablo VI, en Zumba.
La actividad congregó a las parejas facilitadoras que acompañarán el próximo proceso de formación de novios en camino al sacramento del matrimonio.
La jornada estuvo guiada por el padre José Yonelis Torres, asesor arquidiocesano de la Pastoral Familiar. Él animó a los servidores a reflexionar a la luz del Evangelio, a partir del pasaje de Mateo 20, 20-27. Este pasaje relata la petición de una madre que busca un lugar de privilegio para sus hijos.
El sacerdote recordó que “la verdadera grandeza se manifiesta en el servicio humilde, porque todo lo que hacemos es para la gloria de Dios”. Más adelante, profundizó en el capítulo 3 de San Juan, donde Jesús dialoga con Nicodemo, destacando que “la misión en la Iglesia no se limita a lo visible, sino que nace de un encuentro personal con Cristo que transforma y da sentido al trabajo pastoral”.
El padre Torres explicó que la realización de este retiro se enmarca dentro de la planificación anual de la Pastoral Familiar, señalando que “una semana antes de comenzar el EPIM quisimos regalar este espacio a las parejas servidoras para fortalecer su vida espiritual y disponernos con alegría a la tarea misionera que nos corresponde”.
La experiencia se desarrolló durante toda la mañana con momentos de oración, meditaciones y adoración al Santísimo Sacramento, seguidos de un compartir fraterno. En la tarde se efectuó una reunión de organización para ultimar los detalles del nuevo ciclo del EPIM, que se extenderá desde la primera semana de septiembre hasta comienzos de octubre.
Con este retiro, las parejas facilitadoras del EPIM renovaron su compromiso de acompañar a los novios en su preparación inmediata al matrimonio, ofreciendo no solo enseñanzas teóricas, sino también el testimonio de vida que inspira a construir hogares firmes en la fe y en el amor de Cristo.