Al inicio de este año jubilar, como pastores de la Iglesia reiteramos nuestro compromiso de acompañar al pueblo venezolano en sus alegrías y sufrimientos, y contribuir, a través de la cotidiana acción evangelizadora, a que reinen en nuestro país el respeto de la dignidad de la persona, la verdad, la justicia, el estado de derecho, la libertad y la paz.